martes, 30 de septiembre de 2008

Semana del corazón

El pasado 28 de septiembre se conmemoró el Día Mundial del Corazón bajo el lema “Conoce tus Factores de Riesgo”. Para resaltar la importancia de este día se expanden las actividades a toda la semana. En nuestro país dichas actividades constan de algunas de carácter médico: control de presión arterial, peso, talla y circunferencia abdominal y entrega de medicamentos para inicio de tratamientos. Otras de perfil educativo como ser charlas sobre prevención del tabaquismo o sobre estilos de vida saludable, entrega de material didáctico, etc. Además están las actividades físicas, paseos guiados, caminatas, bicicleteadas, clases de gimnasia, etc.
La responsabilidad de cada uno de nosotros es no tomar a la ligera esta semana ni el mensaje que la misma transmite, ya que las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte en nuestro país y una de las principales a nivel mundial.
El nivel de riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares e infartos resulta de una combinación de factores (por eso se les llama de riesgo), de ahí el lema de este año. Dentro de estos factores algunos son modificables (estilo de vida) y otros no (herencia).
Uno de los principales es la hipertensión arterial, la cual puede ser hereditaria, ó consecuencia de nuestro estilo de vida, pero de todas maneras (tomando las medidas adecuadas) la podemos controlar.
Las enfermedades cardiovasculares se pueden prevenir con ejercicio regular, no fumando y con una dieta más sana, baja en sal y grasas, rica en fibra, verduras frescas y fruta. Según la World Heart Federation el consumo de más de cinco piezas de fruta y verdura está relacionado con una disminución del 17% en las enfermedades coronarias. La hipertensión, en concreto, está estrechamente relacionada con un consumo excesivo de alimentos salados.
Estos son solo ejemplos, son muchas las precauciones que podemos tomar, aproveche la semana del corazón, hágase los chequeos, consulte a su médico. Nunca está de más conocer nuestros factores de riesgo.

lunes, 22 de septiembre de 2008

Lo vi en internet (me dijeron que…)

Es cierto, internet a revolucionado el mundo de las comunicaciones. Sin lugar a dudas a puesto a disposición de todo el mundo muchísima información acerca de casi cualquier tema. Dentro de esta información, claro está, se encuentran las páginas y foros sobre entrenamiento y nutrición (como ésta).
Antes la televisión era sagrada, si lo veías en la tele era cierto, “¿estás seguro? Si, si lo pasaron por la tele”. Ahora es internet, si lo viste en internet quedate tranquilo que es verdad.
Pero la realidad nos dice que cualquiera puede tener una página en internet, cualquiera puede tener un blog, cualquiera puede opinar sobre entrenamiento, pero esto no quiere decir que lo que escribe sea cierto.
En los gimnasios antes era muy común (y todavía se escucha) el clásico “porque a mi me dijeron que…” y seguido a eso venía la barbaridad más grande. Pero resulta que el que se lo había dicho era el delibery de la pizzería de la esquina, que lo que sabía porque antes hacía pesas.
Aclaremos algo. Que una persona entrene desde hace mucho tiempo no quiere decir que sepa de entrenamiento, que alguien tenga el físico que a ti te gustaría tener no quiere decir que pueda ayudarte a que tu lo consigas.
Generalmente el “fierrero” de años sabe lo que a él le funciona, que no es lo mismo que saber de entrenamiento. Esto no se trata de despotricar al autodidacta (conozco casos de gente que sabe mucho) y nadie por más título que tenga tiene la verdad absoluta, pero esto es lo que suele aparecer en internet, alguien obtiene resultados con algún método o algún producto y sale a pregonarlo como la gran verdad. Nunca falta quien caiga en el gimnasio diciendo “vi en internet que…”
Fundamentalmente tienen que quedar claras dos cosas:, nadie es dueño de la verdad, tenga título o no y está bien no quedarse con lo que te dijo el entrenador (o el delibery), está bien preocuparse por saber e informarse, pero siempre hay que ver que base tiene el artículo, que estudios lo respaldan, la bibliografía que se adjunta y cosas así.
Que quiero decir con esto? que no me crean, no quiero que crean nada de lo que encuentren aquí, solo quiero generar la duda de que las cosas pueden ser de otro modo.

domingo, 14 de septiembre de 2008

Se viene el verano

Se acerca la temporada estival y comienzan los apuros, hay que bajar la panza, los rollos y levantar la cola lo antes posible.
Cuando te fijas en el almanaque y te das cuenta que se te pasó el año y no hiciste nada para lograr esas metas, te entra la desesperación y salís corriendo para el gimnasio.
Cuando hablas con el entrenador te pones una mano en la barriga (cuidadosamente engordada durante todo el año), la otra en el corazón y con cara de pobre de mi surge la pregunta obligada, ¿podré bajar “esto” para el verano?
Seamos realistas, esto es como el cuento de la cigarra y la hormiga, el que trabajo todo el año tendrá su recompensa y el que no… bueno, pero no está todo perdido.
Vamos a marcar cinco pasos básicos que te van a ayudar a poder broncearte sin tener que esconderte. Y no creamos que esto es exclusivo de las mujeres, así que señores también ustedes, manos a la obra.
1º) Aceptación: Aunque no lo creas el primer paso para lograr cambiar nuestro cuerpo es aceptarlo, de nada sirve desesperar y rechazarse, además esto no servirá para el paso siguiente.
2º) Establecer objetivos razonables: no pretendas de aquí al verano deshacerte de 20 kg, no de manera saludable, por eso es que primero está la aceptación y desde ahí establecer pequeñas metas que podamos cumplir de lo contrario nos frustraremos.
3º) Organización: Si eres los suficientemente organizado/a puedes sacar provecho de eso, por ej; contabiliza las semanas que faltan para irte de vacaciones y planifica las actividad física que vas a realizar semanalmente. Ya sea el trabajo en el gimnasio, las salidas a correr, la piscina etc., tu entrenador puede ayudarte con eso.
4º) Nutrición: ya que tienes las semanas organizadas, establece también los cambios nutricionales que vas a realizar para lograr tu objetivo. Todo paulatinamente, de nada sirven los cambios bruscos, por ej; semana 1 reduzco el consumo de frituras, semana 2 aumento el consumo de vegetales, etc.
5º) Puesta en práctica: ya hiciste todo, te aceptaste, estableciste metas realizables, organizaste el ejercicio y tu alimentación, solo te quede llevarlo a cabo, que tanta planificación no se quede en el papel.
Recuerda que siempre se puede hacer algo y nunca es tarde para empezar, no vas a llegar en la mejor forma de tu vida pero… algo es algo.

martes, 2 de septiembre de 2008

¿Quién se ha tomado todo el vino?

Durante la semana entrenas con pesas, realizas ejercicio aeróbico, te cuidas e las comidas etc., pero ¿que sucede cuando llega el fin de semana?
Probablemente te des algún gustito, alguna comida extra, una salida, ir al baile, algo de alcohol y algarabía general. Y esta bien, lo de la algarabía y las salidas, pero cuando se trata del consumo de alcohol las cosas cambian.
No vamos a hablar desde el punto de vista moral, ni social, veamos esta problemática desde donde nos compete: la puesta en forma.
¿Haz pensado alguna vez que probablemente todo el esfuerzo que realizaste durante la semana no sirva de nada si tu recompensa a todo eso es salir a tomar?En general la mentalidad es “esto lo quemo en el gimnasio”, es común escuchar en el gimnasio “tengo que quemar lo que tome el fin de semana”. Primero que nada, lo que tomaste ya lo asimilaste, no queda dando vueltas en el cuerpo esperando a que lo gastes.
El alcohol aporta calorías “vacías” es decir, no aporta nutrientes. Por lo tanto todas las calorías que aportan crean un excedente calórico que, muy probablemente, se transformará en grasa.Hagamos números. Vamos a suponer, a modo de ejemplo, que eres un/a deportista promedio y realizas tres veces por semana, una hora de pesas y 30 minutos de aeróbicos. O sea que semanalmente gastas unas 1200 kcal aprox. en ejercicio, pero el fin de semana tomas 1 litro de cerveza, “noo, yo no tomo tanto”, tal vez no, pero piensa que son solo 4 vasos. Ese litro de cerveza equivale más o menos a un día de entrenamiento, ya tienes que ir pensando que hay un día de la semana que lo estás desperdiciando, siempre y cuando tomes solo un litro y salgas un día solo. “no, pero yo tomo whisky, que no te hincha”, no te hinchará pero un farolito te aporta las mismas calorías que una cerveza, y en una noche se van varios y algo similar pasa con el vino.Todo esto sin tener en cuenta del daño que es el alcohol para el organismo, no vamos a hacer una apología de lo horrible de tomar alcohol, pero si tienes algún interés en cuidar tu salud y tu figura siempre la moderación es tu mejor aliado.
Salú...